Desde que era pequeña, siempre había soñado con visitar Río de Janeiro. Las imágenes de sus playas infinitas, el emblemático Cristo Redentor y el vibrante ritmo de la samba llenaban mi imaginación. Finalmente, la oportunidad llegó y me sumergí de lleno en la experiencia carioca, explorando cada rincón de esta metrópolis tan llena de vida y contrastes. Hoy, quiero compartir con vosotros los 10 lugares imprescindibles que descubrí en Río, esos que te roban el aliento y te dejan con ganas de más.

1. Cristo Redentor del Monte Corcovado
Subir al Cristo Redentor fue, sin duda, uno de los momentos más emocionantes de mi viaje. La estatua, que abraza la ciudad desde lo alto, ofrece unas vistas panorámicas que cortan la respiración. La sensación de estar allí arriba, con Río a mis pies, es indescriptible.
2. Pan de Azúcar
El atardecer desde el Pan de Azúcar es algo que todos deberían experimentar al menos una vez en la vida. Las vistas de la ciudad bañada por los últimos rayos de sol son simplemente mágicas.

3. Playas: Copacabana e Ipanema
Las icónicas playas de Copacabana e Ipanema no defraudaron. Caminar por la orilla, sentir la brisa marina y ver a los locales disfrutar de su deporte favorito, el futvóley, fue realmente inspirador.
4. Barrio de Santa Teresa
Descubrir el barrio de Santa Teresa, con sus calles empinadas y su arte callejero, fue como entrar en otra época. El tranvía amarillo que recorre sus calles añade un encanto especial a este lugar tan pintoresco.

5. Pedra Bonita
El trekking hasta Pedra Bonita me regaló algunas de las vistas más impresionantes de Río. La sensación de estar rodeada de tanta belleza natural es algo que guardaré siempre en mi corazón.
6. Escalera de Selarón
La Escalera de Selarón, con sus coloridos azulejos, es un homenaje vibrante al arte y a la diversidad cultural. Cada escalón cuenta una historia, convirtiéndola en una obra de arte en sí misma.
7. Parque Lage
El Parque Lage, escondido a los pies del Corcovado, es un oasis de tranquilidad. La mansión en su centro, con una cafetería encantadora, es el lugar perfecto para una pausa refrescante.
8. Real Gabinete Portugués de Lectura
Visitar el Real Gabinete Portugués de Lectura fue como entrar en un mundo de fantasía. La arquitectura y los miles de libros antiguos me transportaron a otra era.
9. Maracaná

Explorar el legendario estadio de Maracaná y sentir la pasión brasileña por el fútbol fue una experiencia única. La historia y la atmósfera del lugar son palpables.
10. Barrio de Urca
El barrio de Urca, tranquilo y pintoresco, fue mi rincón favorito para escapar del bullicio de la ciudad. Sus pequeñas playas y vistas del Pan de Azúcar ofrecen una perspectiva única de Río.
Mi viaje a Río de Janeiro fue una aventura de descubrimientos y maravillas. Cada uno de estos lugares dejó una huella imborrable en mí, y espero que vosotros también podáis experimentar su magia. No olvidéis usar el sentido común en cuanto a seguridad y disfrutar de cada momento en esta ciudad espectacular. Boa viagem, beduin@s, y que Río os enamore tanto como a mí.